Egipcias a la conquista del ciberespacio público
Con las redes sociales, las mujeres buscan eliminar la segregación, aceptar la política de la diferencia y encontrar una teoría de justicia que defienda la libertad y la igualdad.
Sahar Talaat
Puedes conseguir lo que quieras ayudando a otros a conseguir lo que quieren.” Son las palabras de Krista Walochik, presidenta de la empresa Norman Broadbent. Este mensaje nos lleva a reflexionar sobre el potencial transformador de las redes sociales. De hecho, podemos interpretar que la interconectivienpolitismo que conlleva una comunicación creciente entre los usuarios. Por eso, si analizamos las diferentes fases de desarrollo de las redes sociales en Egipto y, sobre todo, la interconectividad femenina, podemos decir que existe un espacio de flujos en las páginas participativas como Youtube, Facebook y Twitter donde las prácticas sociales de las mujeres que consisten en compartir tiempo se multiplican. Así, encontramos secuencias ilimitadas de intercambio e interacciones entre las usuarias repetitivas, programables y espontáneas, en las desempeñan un papel como actores sociales que trabajan para establecer estructuras económicas, políticas, educativas, sociales, simbólicas….
La experiencia de las redes sociales egipcias ha convertido el esquema de las reglas habituales del networking en un poder extraordinario y ha creado oportunidades de éxito en el ámbito personal, de grupo y profesional. Los usuarios egipcios de Facebook, Youtube y Twitter utilizan estas herramientas poderosas, proactivas y accesibles de forma dinámica, inteligente, apropiada e impactante, creando espacios necesarios para desarrollar influencias, contactos, poderes, intercambios y formas de marketing distintas. Las cifras de las usuarias de Facebook, Youtube, Twitter y otras herramientas tecnológicas en Egipto se han duplicado o triplicado meses después de la revolución del 25 de enero de 2011. Existe una estratificación social creciente y evolutiva entre las usuarias egipcias, en la que encontramos:
– Elementos de cooperación permanente (comentarios, lanzamiento de nuevas iniciativas, creación de grupos, intercambio, recomendación de productos y servicios, nuevas experiencias…)
– Las usuarias de Facebook comparten información que consideran de interés colectivo. Siempre proporcionan feedback sobre las nuevas ideas o iniciativas. En muchos casos, asisten a otros participantes o usuarios dándoles apoyo psicológico, técnico, profesional, y animándoles a seguir con sus proyectos o iniciativas.
– Introducen nuevas herramientas educativas y comunicativas para difundir conocimientos, contactos, exhortaciones….
– Por la red circulan distintos tipos de reivindicaciones ciudadanas entre los grupos activos que explican los derechos de los ciudadanos, plantean los pasos para lograr la equidad social, destacan la importancia de conseguir nuevas legislaciones que mejoren los derechos de las mujeres y de la familia así como los derechos económicos y sociales relativos al empleo, el desempleo, la salud, etcétera.
– Las asociaciones de mujeres como ONG o grupos de revolucionarias construyen un espacio sociopolítico y cultural utilizando sistemas de comunicación multimodales para alcanzar sus metas.
Efectos sociales
Un año después de la revolución, el proceso de desarrollo y la evolución de la interactividad virtual frente a la interacción real de las mujeres egipcias han variado significativamente. El nivel de uso activo y continuo de las redes sociales entre las mujeres supera el activismo de los hombres desde la aparición de las redes sociales: según la tradición, ellas están sometidas a restricciones y límites sociales a la hora de disfrutar de sus libertades. El trato y la educación familiar diferencian entre chicos y chicas, favoreciendo a los hombres. Por ejemplo, los padres vigilan permanentemente a las chicas preguntándoles sobre sus amigos; muchas de ellas están controladas cuando salen y deben volver pronto a casa. De ahí que la participación femenina en Internet haya sido bastante alta: simplemente porque pasan más tiempo frente al ordenador.
Pero después del 25 de enero de 2011, las mujeres que no tenían ningún interés por el activismo político decidieron comprometerse con el uso de los medios sociales y, sobre todo, las páginas de Facebook, Twitter y Youtube, animando a sus padres a participar en las redes sociales. En muchas ocasiones, encontramos a familias enteras participando en manifestaciones gracias a que sus hijas les animaron a formar parte del proceso revolucionario. Meses después de la revolución, la cantidad de horas de participación de las chicas en Internet ha disminuido, pero hay más participación comunitaria y de grupos sobre el terreno.
Las mujeres ahora salen más, participan en reuniones de partidos, movimientos o grupos políticos, en lugar de solo interactuar en el mundo virtual. Se han convertido en unidades activas desplegadas sobre el terreno que pueden establecer de forma eficaz contacto directo con la gente, examinar sus sugerencias y elaborar un discurso real gracias a las aportaciones directas de grupos heterogéneos de la sociedad egipcia. Su participación sobre el terreno les ha proporcionado unos valores de integración. Estas formas de interacción con el mundo real les han permitido configurar un discurso argumentado y con relevancia práctica. Las visiones de muchas egipcias ya no son distanciadas, incluso las que pertenecían a una categoría social desfavorecida se encuentran más integradas.
Existe un ambiente más coherente que facilita sus procesos de interacción directa para explicar sus ideas en el espacio social antes lejano para ellas. Esto significa que muchas mujeres egipcias se han dado cuenta de la necesidad de estar presentes en aquellos lugares donde se debaten y adoptan las decisiones. De esta forma, algunas contribuyen a un cambio sociocultural en el que se accede a conocimientos diferentes y en donde se generan elementos significativos para la construcción de la sociedad. Las usuarias activas solo por Internet buscan pautas y procedimientos para cambiar sus entornos.
Intentan continuamente afirmar sus derechos, resolver importantes y controvertidas cuestiones sobre su condición social. Piden una reforma del sistema educativo, sobre todo porque el nivel de analfabetismo es muy alto entre las egipcias. Al preguntarles por las razones de su activa participación en las redes sociales, la mayoría de las entrevistadas confirmaron que la educación de las mujeres es la clave del desarrollo en Egipto. Es una necesidad imperiosa para modificar sus condiciones de vida, dar a conocer nuevas visiones y adquirir nuevos conocimientos sociales y culturales, de modo que se contribuya a que la sociedad evolucione y se desarrollen nuevos conceptos que puedan modificar los estereotipos basados en el machismo.
Procesos tecnológicos y sociales
El marketing y los negocios en las redes sociales constituyen aspectos importantes en la actividad de las mujeres egipcias. Son elementos utilizados por muchas de ellas para abrir nuevos mercados. Estas prácticas se están extendiendo entre las internautas, sobre todo por Facebook, para comercializar productos artesanos elaborados por mujeres discapacitadas, o por mujeres que tienen extensas familias a su cargo o que no cuentan con financiación para empezar su propio negocio.
Muchas páginas de Facebook y los breves mensajes de Twitter facilitan el entorno y animan a comprar estos productos a precios muy razonables. Algunas artistas recién graduadas de la facultad declararon que a través de Facebook han logrado entablar relaciones con muchos clientes y de esta forma empezaron a vender sus productos. Algo que no se atrevían a hacer antes. Un ejemplo es “El Fan Midan” (el Arte es la Plaza), que empezó como iniciativa cultural de artistas que vivieron en la plaza Tahrir. De hecho, en la plaza Abdin, cada primer sábado de mes, este grupo organiza una jornada cultural. Es un espacio gratuito para promover las bandas musicales de jóvenes y para que los artistas recién graduados expongan sus productos. El año pasado se creó un rincón de pintura y viñetas donde los pintores explicaban sus ideas al público, creando a su vez círculos de diálogo.
El objetivo de crear un espacio intelectual y de entretenimiento es, por un lado, una forma de ayudar a que la cultura sea accesible a los marginados y a la población aislada culturalmente. Por otro, las mujeres, entre ellas las jóvenes que sufren restricciones familiares y sociales, encuentran una ventana para exponer sus productos y formar parte del grupo artístico. El feminismo y el activismo virtuales comenzaron hace años a tener una presencia intensa en Internet, pero la aparición de las redes sociales ha facilitado el esfuerzo de muchas feministas. Las actividades de las mujeres en las redes sociales en un principio se producían a nivel individual. Con el tiempo y el avance tecnológico, las ONG, grupos feministas, sociales y políticos decidieron adoptar esta herramienta electrónica para conectarse con la sociedad civil.
Las páginas de las asociaciones y organizaciones feministas y de derechos humanos han ofrecido a las mujeres un espacio para expresarse y han garantizado unas instituciones que se interesan por ellas y están dispuestas a defender sus intereses legales, económicos, sociales, sanitarios o educativos. Las ONG feministas decidieron formar una coalición después de la revolución para consolidar la imagen de la mujer egipcia, porque existía un vacío institucional en defensa de los derechos de la mujer. Durante este tiempo, las páginas web de las asociaciones y ONG han desempeñado un papel clave a la hora de fomentar la presencia de la mujer en la sociedad, en un momento en el que los movimientos radicales islamistas han empezado a amenazar los logros de las mujeres.
Después de la revolución han aparecido grupos de tendencia islámica que utilizan la religión en favor de intereses políticos. Hace años que están muy presentes en el activismo social (hospitales, mezquitas, asociaciones islámicas) y a través de las redes sociales, pero hoy las mujeres conocidas como las “Hermanas” participan en las redes sociales intentando mezclar lo social con lo religioso para apoyar a sus miembros en el Parlamento y el Senado. Al mismo tiempo, Internet es un medio para atraer a las jóvenes de las universidades y darles a conocer la ideología de los Hermanos Musulmanes. Esta actividad ha incitado a otros activistas opositores e independientes a responder por Internet a los miembros de los Hermanos Musulmanes. Por ejemplo, la página “Ikhwan Kazebun” (Los Hermanos Mentirosos) nació como respuesta de muchos activistas, entre ellos chicas, con el fin de destapar las mentiras de los Hermanos Musulmanes, su afán por manejar la política interna y aprovecharse de la religión para ganar los votos de los pobres en las elecciones legislativas.
Al mismo tiempo ponen de relieve sus declaraciones oficiales, vídeos y fotos para denunciar que sus comportamientos no se corresponden con sus promesas y que persiguen una estrategia de cambio planificado haciendo populismo con los valores del desarrollo. Este grupo argumenta que los políticos islamistas y salafistas utilizan las mismas actitudes, formas y estrategias que el disuelto Partido Nacional Democrático. Los islamistas mantienen una guerra abierta contra las mujeres y consideran peligroso que estas obtengan la igualdad. Los fanáticos presentan sus ideas por Internet y crean comités para comentar las ideas liberales defensoras de las interpretaciones modernas del islam y del progreso de las mujeres en la sociedad. Por otro lado, la creadora de “Baheya Ya Masr” (Egipto Preciosa), Inas Mekkawi explica que el arte es el elemento más expresivo y directo para transmitir cualquier mensaje. Baheya es un grupo artístico que busca la innovación.
Es un grupo homogéneo formado por personas de diversas tendencias políticas y diferentes clases sociales que utilizan y reviven las tradiciones culturales, por ejemplo promoviendo el renacimiento del cine egipcio, que contribuye a implantar los valores del desarrollo humano, la convivencia y la ciudadanía. Inas Mekkawi declaraba: “no utilizamos elementos sofisticados para conectarnos con los internautas ni con nuestra gente en la calle. Introducimos siempre distintas formas artísticas, personajes simbólicos, grafitis, dibujos, cómics… Nuestra dedicación principal se centra en las cuestiones más urgentes. Por ejemplo, nuestro grupo ha estado hablando con grupos de mujeres que viven en áreas desfavorecidas de El Cairo, donde durante años había escasez de servicios comunitarios, y cuyos habitantes estaban expuestos a una permanente negligencia.
El antiguo régimen aprovechaba las elecciones para conseguir sus votos bajo la amenaza de ser excluidos de los proyectos de infraestructuras.Hemos iniciado una campaña para explicar la Constitución y la Asamblea Constitucional de forma simple para que las mujeres con poca educación, o sin ella, puedan entender su importancia. Sin embargo, resulta complicado hacer entender la relevancia de estos temas cuando las necesidades urgentes de estas mujeres son disponer de electricidad, agua potable, infraestructuras básicas o tener una escuela cerca donde llevar a sus hijos”.
Las actividades del grupo Baheya se basan en un compromiso personal de cada miembro hacia las mujeres marginadas para que se reconozca la necesidad de su integración en la sociedad y se adquiera consciencia de sus condiciones (educativas, sociales, económicas, de salud, familiares, etcétera) para buscar soluciones. Baheya utiliza los métodos multimedia en sus encuentros con distintas comunidades por todo el país, para ofrecer experiencias prácticas que sirvan al desarrollo del pueblo sin caer en la idealización de los enfoques participativos. Este modelo puede desencadenar un proceso para crear un puente entre los privilegiados y los marginados y silenciosos.
Conclusión
Las redes sociales de las mujeres egipcias constituyen un sistema de nodos, conjuntos de movimientos, elementos integrados y desintegrados, lugares específicos, segmentaciones, ubicaciones, etcétera. En este mundo tecnológico encontramos niveles de interactividad que han marcado descubrimientos que plantean cuestiones sobre la identidad, la justicia, la distribución de poderes, la opresión, las libertades, la creación de fronteras o la belleza del arte. En la actualidad, se busca la opción de eliminar la segregación, aceptar la política de la diferencia y encontrar una teoría de justicia que defienda las libertades y asegure la igualdad. El potencial comunicativo a través de las redes sociales produce una diferenciación social y cultural compartida y heterogénea.
El mundo multimedia incluye unas capacidades de seleccionar y proporcionar opciones más fáciles y accesibles para comunicarse mejor. El lenguaje utilizado en las intervenciones y comentarios facilita el espacio compartido. Este lenguaje ayuda a superar los perjuicios y la discriminación sistemática contra las minorías y las mujeres. Las activistas egipcias de las redes pertenecen a tres categorías. En primer lugar, se encuentran las que se concentran intensamente en la participación virtual. En segundo, las que comparten su tiempo y espacio profesional entre el activismo a través de las redes y la implicación en actos sociales como manifestaciones, reuniones de grupos políticos, sociales y culturales.
La tercera categoría la forman el número elevado de activistas que ha disminuido su participación virtual e invierte más tiempo y esfuerzo en los cambios sociales y culturales. Muchas explican que han pasado de “Facebook a Facedo”, es decir, aplican los conocimientos virtuales y los convierten en acciones para promover la conciencia pública y construir espacios de ciudadanía más libres en los que se acceda al conocimiento y la información. Algunas de estas activistas son reconocidas internacionalmente, como Samira Ibrahim que fue, entre otras, expuesta a las pruebas de virginidad. Ahora, muchas activistas, críticas con el sistema militar y de los islamistas han sido acusadas ante la ley. Últimamente, estos casos se han intensificado como forma de contrarrestar el activismo político en general.