1979-2019: 40 años de guerra en Oriente Medio

Las protestas en las calles del mundo árabe el año 2011 y las que tienen lugar hoy en algunos países de la región, como Argelia o Líbano, tienen un peso específico diferente al que pueden tener las protestas que se registran con reivindicaciones similares a otros lugares del mundo.

Hamit Bozarslan, director de estudios à la École des Hautes Études en Sciences Sociales (EHESS) de París, señala que esta especificidad se debe a las dinámicas que se generaron en el mundo árabe en 1979, con la quiebra de los movimientos de izquierdas y la emergencia del islamismo fruto de varios hechos, y que continúan marcando la evolución de esta región.

El contexto revolucionario de 2011 en el mundo árabe, que reivindicaba «dignidad», «libertad», «igualdad» y «respeto», tenía como objetivo integrarse en el que la llamada «sociedad liberal democrática burguesa». Pero, fracasó a excepción de Túnez.

Cerca de diez años más tarde, el experto ve en las protestas en Sudán, Argelia, Líbano o Irak, una lucha para alcanzar la «ciudadanía», en el sentido de disfrutar de participación política real y de capacidad de determinar el propio futuro. Unas reivindicaciones que están en sintonía con las observadas en América Latina, África y Asia pero que ponen de relieve, según Bozarslan, que las dinámicas prerrevolucionarias tienen un peso significativo en la evolución del mundo árabe.
Bozarslan es colaborador habitual de medios franceses como Le Monde y es autor de una larga lista de obras, entre las cuales, el ensayo Crise, violence et dé-civilisation (2019), Révolution et état de violence. Moyen-Orient 2011-2015 (2015), Histoire de la Turquie. Del Empire à nos jours (2013), Une histoire de la violence au Moyen-Orient. Del final del Empire ottoman à al Qaeda (2008), From Political Struggle to Self-Sacrifice: Violence in the Middle East (2004), La pregunta kurde: Etats te minorités ave Moyen-Orient (1997).